9 marzo, 2021
En esta entrevista a Juan Manuel Zamora, el Responsable del Desarrollo Comercial del Equipo Rasti de Robótica y Educación cuenta cómo una tradicional marca de juguetes argentina se convirtió en un referente de la programación y la robótica en Latinoamérica.
Hay cosas que nos trasladan inmediatamente a nuestra infancia. Recuerdos que mediante aromas, experiencias y juegos despiertan en nosotros esas conexiones neuronales que nos hacen sentir niños. Uno de esos elementos es la palabra Rasti. Todos en nuestra infancia hemos jugado largas horas con esos bloques que nos permitían construir lo que quisiéramos explotando nuestra creatividad y entretenimiento al máximo.
En esta oportunidad entrevistamos a Juan Manuel Zamora, el Responsable del Desarrollo Comercial del Equipo Rasti de Robótica y Educación quien nos cuenta cómo una tradicional marca de juguetes argentina se convirtió en un referente de la programación y la robótica en Latinoamérica.
EdTech Online: Nosotros obviamente de chiquitos jugábamos con los juguetes de Rasti, ¿cómo llega la empresa a crear el equipo Rasti de Robótica y Educación?
Juan Manuel Zamora: Rasti es una empresa que está hace muchos años vinculada a la realidad argentina, todos de pequeños hemos jugado con bloques de Rasti, lo siguen haciendo nuestros hijos y lo seguirán haciendo nuestros nietos sin duda porque es algo divertidísimo y es una marca a la que la gente le tiene muchísimo cariño y ese cariño se da porque ha ocupado momentos importantes de la vida familiar y eso genera recuerdos muy lindos.
En cuanto a cómo llegamos a nuestra línea de robótica, en realidad, mucho no tuvimos que hacer para que esto decantara en un proyecto de educación porque cuando vos estas jugando, a través del juego ya estás promoviendo distintas habilidades vinculadas al aprendizaje y entonces solamente nos faltó agregarle tecnología al sistema constructivo de Rasti e incorporarle lo que consideramos necesario para que un colegio puede empezar a implementar robótica educativa.
Esta línea de productos, en un principio fue pensada únicamente para colegios y después, dado el altísimo interés que genera en el entorno familiar, también se incorporó la venta hogareña ya que hay familias que están con sus equipos en su hogar y lo tienen como una alternativa más de diversión, de formación y de compartir tiempo entre adultos y niños.
ETO: ¿Hay alguna diferencia entre la versión escolar o educativa propiamente dicha y la versión familiar?
JMZ: Sí, hay algunas diferencias. En realidad no de equipamiento ya que el mismo casi coincide entre ambas versiones pero en la versión escolar tiene una serie de herramientas que soportan la propuesta como, por ejemplo, video tutoriales de programación, una plataforma para que los docentes puedan llevar a cabo los diferentes desafíos, modelos de ABP (aprendizaje basado en proyectos) segmentados por edades, múltiples desafíos, videos tutoriales de construcción, soporte para instituciones educativas, garantía, acompañamiento, capacitación. En definitiva, contamos con una batería de recursos que hacen mucho más simple el desembarco de la robótica en la educación.
ETO: ¿Rasti solamente se comercializa en Argentina o llegaron a otros países?
JMZ: Ya estamos en otros países además de Argentina y como el proyecto es tan interesante nos llaman de muchos lugares y vamos avanzando de a poco con diferentes países de Latinoamérica. Ahora estamos en Uruguay, Colombia, Ecuador, vamos a estar en Chile y estamos en Paraguay también. También estamos avanzando con un posible desembarco en Canadá, allí hay una comunidad latina importante y ahí estamos cerrando acuerdos con un representante.
ETO: ¿Ustedes venden directo a las escuelas? O ¿venden a través de un sistema similar al de los fabricantes de informática en donde se manejan con mayoristas y canales de distribución?
JMZ: Nosotros tenemos distribuidores. Tenemos representantes comerciales en los diferentes lugares y zonas geográficas de Argentina y en estos países que te mencioné. Ellos son los que se encargan de la comercialización en las instituciones educativas. Aunque por una cuestión de conocimiento de marca, en el caso de Argentina hay muchas instituciones que directamente hacen los acuerdos con Rasti y otras a través de estos canales de distribución.
ETO: Ya tienen un recorrido de un tiempo en el mundo de la tecnología educativa, ¿Qué aspectos positivos encontraron durante este período?
JMZ: Junto con Gastón Jeger que es el desarrollador pedagógico del proyecto ya habíamos tenido experiencia en los primeros momentos del desarrollo de la robótica educativa en Argentina y en esa época (hace 10 años atrás) era muy difícil poder trasladar esa necesidad de ir incorporando esas habilidades y esos conocimientos que iban a servir para el futuro. Era muy difícil que las instituciones educativas reconocieran en esa época una necesidad de aplicar robótica en todos los niveles; entonces lo que sucedía era que la robótica y la programación quedaban un poco vedadas a la mayoría y, en los pocos colegios que se aventuraban a dar robótica, el grupo de trabajo era muy reducido: o eran algunos alumnos de secundario que participaban en competencias o eran grupos muy reducidos que tenían inquietudes con respecto a esta área en particular. Hoy el salto es enorme porque además de haberse convertido en un contenido obligatorio (curricularmente obligatorio en Argentina) luego de un largo proceso del que también fuimos participes porque acompañamos esta evolución positiva para la educación argentina, las escuelas reconocen la necesidad, hay una búsqueda sobre estos temas y por otro lado también las familias como agentes sociales vienen generando el empuje hacia las instituciones educativas para que sus hijos empiecen a incorporar estas habilidades porque lo ven como absolutamente necesario para su desarrollo educativo posterior o para un futuro laboral con mayores habilidades para sumar a su formación y esa aceleración que hubo en cuanto a la necesidad de incorporar este tipo de contenidos también estuvo acompañada por una reformulación de los recursos.
ETO: ¿Qué cambios se produjeron en la oferta de robótica para educación?
JMZ: Los recursos que en algún momento se utilizaban o los que hasta hoy se siguen utilizando eran muy técnicos. Estaban pensados para las escuelas técnicas, para los adolescentes, para profesores especializados en el área. Rasti, en su desarrollo, da un salto de calidad en cuanto al usuario final para el que está pensado este tipo de proyecto. Nosotros pensamos la robótica de Rasti con el docente como mediador para con los alumnos, porque era clave que el docente le fuera perdiendo el temor a la programación y a la robótica y que fuera incorporando también junto con sus alumnos, o previamente, conocimientos para poder desarrollar esta área particular para la que no fue preparado. Porque en su plan de formación terciaria el docente no tuvo esta materia ni tampoco tuvo una capacitación particular sobre este modelo. Entonces desde Rasti generamos una serie de herramientas para que la robótica llegara de forma más democrática a todas las instituciones.
ETO: ¿Podrías nombrarnos algunas de las herramientas a las que te referís?
Nosotros tuvimos durante el desarrollo muy en cuenta que nuestro centro era el docente, el poder darle a ellos la forma más sencilla de vincularse con la robótica sin que esto les cause temor, eso nos permitió ubicar al docente de aula en el centro de la propuesta. En los casos anteriores de placas y sensores sueltos, el docente de aula también era un espectador igual que esos chicos que no se animaban a vincularse con la robótica y la programación sólo eran observadores de aquellos que tenían alguna habilidad. Hoy el docente es un miembro más de este proceso colaborativo de aprendizaje porque además de formarse y obviamente desplegar todas sus capacidades y cualidades de educador se divierte junto con los chicos y puede también ir aprendiendo a la par de ellos, entendiendo que los chicos hoy tienen genéticamente mayor facilidad para vincularse con la tecnología que nosotros los adultos y entonces eso dispara en ellos una sensación de tranquilidad. Antes los educadores estaban obligados a aprender mucho y formarse para poder trasladar estos conocimientos a los chicos; hoy nosotros les pedimos que se relajen y que aprendan junto con los estudiantes, que sean un miembro más de los equipos que se van formando para que si algo no sale que sean los mismos chicos quienes vayan resolviendo. Cuando entendieron esta idea se empezaron a relajar y empezaron a disfrutar más la incorporación de la robótica y la programación. Comprendieron que es un recurso más de todos con los que ya cuenta el docente para poder seguir abordando los diferentes contenidos curriculares. Entendieron que desde la robótica podían trabajar física, matemática, educación ciudadana, etcétera, entonces para ellos se volvió muy interesante.
ETO: Además del hardware ¿suelen darle algún elemento ordenador curricular acompañando los kits de robots?
JMZ: Sí, ofrecemos una propuesta que tiene cuatro bloques fundamentales que nosotros consideramos necesarios para poder llevar adelante un buen proyecto en un colegio: el equipamiento, el soft educativo que es el Scratch con la extensión propia de Rasti block dentro de Scratch (nosotros armamos una extensión dentro del Scratch para hacerla más familiar a los chicos y para generar algunos atajos de programación y así vincularlos con nuestros robots) pero en realidad están programando en Scratch; una plataforma educativa que contiene esto que vos me estás consultando, el paso a paso de cada uno de estos desafíos que se les proponen y la vinculación con las diferentes áreas curriculares, en principio con los núcleos de aprendizajes prioritarios de Educación digital, programación y robótica y con otros contenidos curriculares de diferentes años, conocimiento del medio, matemática, lengua. Esta herramienta facilita el trabajo del docente y además le brinda seguridad porque, en paralelo, en el espacio docente nosotros lo que hacemos es darle herramientas de resolución y orientarlos en la evaluación por rúbrica para que ellos también cuenten con ese material y que ese material les brinde seguridad. Lo que deseamos es que todo lo que le brindamos como soporte sirva como disparador y que después cada docente a medida que vaya adquiriendo la habilidad en el uso de un modelo de ABP pueda desarrollar sus propios proyectos y que los chicos puedan crear sus propios diseños y hacer sus propios desarrollos de programación.
ETO: ¿con la gente de Santillana han desarrollado una alianza estratégica?
JMZ: Con Santillana nos buscamos desde que Rasti empezó con el desarrollo del proyecto porque coincidíamos en la mirada pedagógica, porque coincidíamos en la calidad del material que acercamos a las instituciones y la forma en la que nos vinculamos con los docentes; en paralelo, obviamente, Santillana también hace muchos años está haciendo un excelente trabajo a nivel editorial en Argentina y en el resto del mundo, nosotros fuimos haciendo lo nuestro y fuimos consolidando una base de colegios usuarios muy importante. Concretamente en el inicio de nuestra alianza empezamos a desarrollar en conjunto el modelo “modo block” que es una propuesta educativa de desarrollo pedagógico del equipo de Santillana con los equipamientos de Rasti, ese es el primer paso de la alianza estratégica y obviamente estamos desarrollando diferentes productos también de forma conjunta porque “Modo Block” se está transformando en un éxito y nosotros ya tenemos en nuestra hoja de ruta de trabajo con Santillana avanzar sobre otros niveles y otros proyectos educativos.
ETO: Esta alianza estratégica no es solamente para Argentina…
JMZ: En principio no es solamente para Argentina, ahora la tenemos en Argentina pero la intención es llegar al resto los países latinoamericanos
ETO: Directores escolares, ¿Qué consejos le darías a un equipo de conducción escolar acerca de la implementación y adquisición de herramientas de robótica para su escuela?
JMZ: En principio que se animen dado que para la institución pareciera ser una gran inversión porque obviamente se tiene que equipar y tiene que capacitar a sus docentes y, además, tiene que darle el espacio de vuelo dentro de la escuela.
Esa inversión, dependiendo mucho de la institución educativa tiene diferentes escalas. A nosotros como modelo de vinculación con las instituciones nos identifica una palabra que es flexibilidad y la aplicamos todo el tiempo y escuchamos mucho, pero mucho a la institución educativa, al representante legal, a los directivos, a los especialistas y nos adaptamos a los recursos de la institución.
Entre nuestros usuarios hay instituciones que disponen de los recursos como para arrancar con todo el proyecto, y hay otras que lo van escalando. Desde Rasti siempre invitamos a que se animen con algo, pueden empezar con algún segmento, con un año, con un nivel, pueden empezar con dos kits, pueden empezar con la producción completa, como ellos quieran y se sientan más cómodos. Nosotros los acompañamos como acompañamos a todos los colegios. Nos encanta ver ese desarrollo, nos encanta ver la aventura de tomar la decisión de ingresar a la comunidad educativa Rasti. En realidad, nos apasiona que un colegio nos diga: “bueno, avanzamos”, nos pone muy contentos y acompañamos a todos por igual.
En definitiva, al Representante Legal de un colegio le diría que se anime y que va a conseguir muchos beneficios, que son beneficios que los chicos van a generar no sólo para las áreas técnicas sino en el resto de las áreas. La robótica y la programación brindan a los chicos diferentes habilidades que les permiten organizarse mejor en las tareas, aprender a trabajar de forma colaborativa, aprender a resolver problemas en equipo, a ser más autónomos en las actividades que emprendan, a mejorar su calidad en cuanto a la investigación, a desarrollar su creatividad, pero por sobre todas las cosas, les permite jugar que es algo que no debe faltar en la educación y a lo que hay que devolverle mayor espacio porque el juego es un generador de distintas alternativas de vinculación entre los chicos y predispone de otra manera para el estudio ayudando a generar un mejor clima institucional. Por esos motivos que son los que se aplican para los chicos y sus beneficios y, por otro lado, para la institución en sí misma es una una gran herramienta para seguir actualizándose e incorporar aún más estas nuevas herramientas tecnológicas.
ETO: ¿Qué necesita una escuela para armar un aula ideal?
JMZ: Lo bueno que tienen los kits que Rasti propone es que se comparten. Se comparten dentro de la institución en varios niveles, entonces este ejemplo vos me estás planteando para una aula se puede reproducir para otras aulas más de ese mismo año, para otras aulas más de niveles diferentes hacia abajo, hacia arriba y entonces el equiparse con algunos kits le va a permitir tener la posibilidad de que casi todos los niveles estén trabajando robótica y programación; luego la institución decidirá si sigue escalando o si sigue haciendo una inversión más grande para para agilizar o para distribuir mejor el equipamiento pero en un curso con 30 alumnos con 5 o 6 kits preferentemente podría estar trabajando tranquilamente separados en grupos y trabajando con una computadora vinculada a cada uno de los kits, ellos podrían estar trabajando muy cómodamente
ETO: ¿Cómo está compuesto un kit de Rasti?
JMZ: Nosotros tenemos varios varios kits, empezamos por algunos básicos. Siempre recomendamos a la institución educativa, que si va a hacer la inversión, que en dicha inversión genere también una proyección de alcance que le va a permitir amortizar mejor el equipamiento porque va a llegar a mayor cantidad de alumnos.
Nos gusta mucho sugerir el Oki 2 que es una versión que se puede trabajar tanto en primaria como secundaria y que tiene más de 15 sensores actuadores, sensor de temperatura, sensor humedad de suelo, encoder, sensor de sonido, sensor de luz, sensor de gases, etc. y está muy bien equipado y obviamente que también está soportado por una batería de actividades y desafíos que le van a permitir a los chicos replicar los modelos que en Rasti les proponemos y generar sus propios modelos.
Es otro impulso que nosotros le damos a la presencia de los kits, el hecho de que un kit esté en una escuela y que todo el soporte que Rasti le brinda es el punto de partida porque después los chicos van a superar, sin duda, lo que nosotros le proponemos en cuanto a creatividad y en cuanto a dificultad. Así que creería que con 5 kits un colegio podría empezar tranquilamente.
ETO: ¿Hace cuántos años vienen comercializando la línea Rasti Educación? y ¿Con qué barreras se encontraron?
JMZ: Rasti hizo el lanzamiento oficial del proyecto en febrero del 2019, con lo cual tuvimos todo el 2019 en donde fuimos sumando usuarios, donde fue creciendo esa comunidad de usuarios de colegios, universidades y empresas vinculadas a esta comunidad y después tuvimos un 2020 tranquilo, o sea, por debajo de las expectativas, pero aun así se siguieron sumando colegios.
Ahora, en este preciso momento, estamos en el pico de trabajo de lo que refiere a este segmento especial de Rasti y estamos en el orden de los 210 colegios usuarios del proyecto, lo cual es mucho para un producto educativo y te lo digo con experiencia porque por lo que te comentaba al principio en realidad es un caso bastante particular que en tan poco tiempo y con tan poca historia en el segmento educativo (porque no estamos hablando de una editorial sino que estamos hablando de una empresa de juguetes que sí se prepara para esto porque 4 años previamente fuimos trabajando con el proyecto, con el equipo de profesionales, con experiencia en educación) generamos esta particular comunidad con tanta cantidad de instituciones educativas.
Así que nuestra principal barrera fue obviamente la pandemia que nos generó un freno en todo porque las instituciones educativas no podían tomar decisiones y para nosotros también fue un desafío porque tuvimos que generar instancias adecuadas para que las instituciones le dieran continuidad pedagógica a la responsabilidad que habían asumido de dar robótica y programación en sus colegios, con lo cual ahí trabajamos bastante en lo virtual, preparando recursos, herramientas y formando a los docentes.
Realizamos una serie de capacitaciones a través de webinars, realizamos algunos desarrollos en la página para el momento en que la familia no podía salir de su casa, era el tiempo del “yo me quedo en casa” y fuimos acompañando, escuchando primero a las instituciones educativas y generando alternativas de vinculación pedagógica en la distancia con el equipamiento de Rasti. Eso también fue un desafío, también armamos propuestas de capacitación y formación docente, armamos talleres para los niños porque había que ocupar ese tiempo y porque había mucho interés de parte de los chicos de aprender robótica con Rasti; así que esos talleres son un éxito y los seguimos dando de forma directa con un equipo de profesionales, así que esa fue la principal barrera la pandemia.
ETO: Vos nombrabas 210 escuelas que adquirieron la solución de Rasti, a nivel gubernamental ¿ustedes también comercializan y después esos kits llegan a las escuelas de gestión estatal?
JMZ: Sí, tenemos clientes institucionales. Trabajamos con municipios. Trabajamos con provincias. Trabajamos con organismos dentro de las provincias y también ellos se equipan y toman proyectos educativos Rasti para acercar a las instituciones educativas. La gradualidad del alcance la dispone cada segmento, pero sabemos que también ahí llegamos a muchas instituciones además de las 210 que te mencioné antes.
ETO: ¿Cómo ves el mercado edtech en la Argentina y en toda Iberoamérica?
JMZ: Yo lo que noto es una gran riqueza tecnológica para poder acompañar la aplicación de contenidos en el aula y entiendo que estamos en una etapa que es muy promisoria para el mercado en general porque las instituciones educativas todavía no han dado el gran paso de equiparse porque obviamente es un proceso difícil para las escuelas ya que tienen que invertir, pero sí creo que, hoy por hoy, la tecnología pasó a ser un recurso necesario en las instituciones y un espacio de formación clave para los educadores.
Es clave básicamente porque el interés de los chicos está pasando por ese lugar y creo que hay mucho más para desarrollar todavía, entiendo que la gamificacion, el juego, las competencias deportivas digitales en la que participan los chicos, las vinculaciones que generan los espacios de interacción en redes y todo lo demás todavía no llega de lleno a la educación y me parece que muy rápidamente esos espacios se van a ir generando.
Entonces, esa tecnología está disponible, sólo falta que los que toman decisiones en la implementación entiendan que va a ser un recurso más de todos los que ya tienen, sin quitar del centro al docente, porque el docente es clave en el rol educativo y no se reemplaza para nada, pero que el mismo docente y la misma institución sí tienen que aprender a convivir con estos recursos y a sacarle el mayor provecho, porque lo que logramos creo que es un mayor entusiasmo de parte de los chicos.
ETO: ¿Podrías adelantarnos algunas novedades de Rasti para este inicio de clases?
JMZ: Terminamos un largo proceso, generado también por la pandemia, de desarrollo conjunto con una empresa francesa que es un software educativo que permite la programación virtual con modelos 3D. Esos modelos 3D programados pueden ser testeados en línea y se puede comprobar que la programación funciona tal cual como si estuviéramos trabajando con elementos físicos. Como si estuviéramos trabajando con el robot físicamente, pero lo hacemos en la pantalla. Por supuesto que después esa misma programación puede ser transferida al robot físico y funciona exactamente de la misma forma que funciona en el digital.
Este es un desarrollo clave porque va a favorecer mucho la educación híbrida, hoy el modelo de educación dual que todavía nos obliga a mantener el distanciamiento y generar estas burbujas de trabajo entre los alumnos y docentes va a permitir que un educador pueda estar trabajando en clase con un grupo de alumnos con el equipo físico y pueda estar trabajando el resto de los alumnos en su casa como si estuvieran en el aula con los equipamientos.
ETO: Para finalizar, ¿Podrías adelantarnos la fecha de lanzamiento de este software?
JMZ: Esta semana que empieza lo lanzaremos y a partir del lunes o el martes, ya empiezan a salir algunas comunicaciones.
Además, Rasti fue elegido desde Francia para desarrollar Rasti Miranda. La empresa francesa que nos eligió es IRAI que es una de las empresas de desarrollo tecnológico más importante del mundo en cuanto a robotización y simulación, trabaja con las mejores empresas del mundo y tiene en su software diferentes tipos de robots que son los mejores a nivel mundial y en Rasti, como empresa argentina, estamos ahí dentro con lo cual también es un orgullo que nos hayan convocado para realizar este desarrollo conjunto.